La necesidad de controlar y prevenir las plagas que azotan al sector agrícola es una problemática que siempre está buscando innovaciones. El control biológico surge tras la necesidad de aportar una alternativa viable para el manejo de plagas y enfermedades de plantas, además de ser amigable con el medio ambiente, obteniendo un costo beneficio muy favorable. El control biológico es el empleo de diferentes organismos o los compuestos obtenidos a partir de ellos, solos o en combinación y causan una diminución de los efectos dañinos de una población que afecta el crecimiento y/o productividad de un cultivo. Los co-cultivos en este artículo se presentan como sistemas que nos ofrecen una variedad de metabolitos e interacciones beneficiosas para la aplicación en el control biológico. La gran variedad de especies del reino fungí y su capacidad de asociación con otros microorganismos semejantes e incluso muy diferentes entre sí, ofrecen un gran campo de aplicación. Estas asociaciones son capaces de elevar la producción de metabolitos de interés biológico, como lo es el uso de hongos patógenos en el co-cultivo para la producción de ciertos metabolitos de interés en los hongos biocontroladores que en monocultivos presentan una baja o nula producción, todo esto nos abre una visión sobre el uso potencial, ventajas y perspectivas sobre los co-cultivos. Se realizó una revisión bibliográfica, para recabar datos acerca de los usos, aplicaciones, y posibles aportaciones en otras áreas, ya que los co-cultivos se utilizan cada vez con mayor frecuencia, resaltando que los co-cultivos, consorcios o cultivos mixtos, son posibles y una muy viable opción en el área del control biológico, porque nos ofrece nuevos mecanismos, perfiles enzimáticos más complejos, metabolitos nuevos y muchos más beneficios.
Palabras clave: Agricultura, alimentos, biotecnología, alimentos, metabolitos.
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